11 de agosto de 2011

Déjame, Déjame Siempre.



Déjame.
Déjame cumplir mis arrebatos,
y llenar de locuras cada día,
decir tonterías en los buses
y bailar sin gracia en las esquinas.

Déjame.
Déjame soñar mil fantasías,
intentar hacerlas realidad todos los días,
hacer cuentas con abrazos y sonrisas,
y descubrir su infinita maravilla.

Déjame.
Te lo pido.
Por el silencio nocturno de los parques,
por el ruido de la gente de la calle,
por el sendero invisible que en el aire
siguen juntos los aviones y las aves.

Déjame,
sólo, déjame.
Déjame comer en silencio mis desvelos,
ocasionados por mis constantes desaciertos;
beber despacio mis llantos y lamentos
para no manchar tu sonrisa que es mi cielo.

Déjame,
por favor déjame,
mantener vivo a ese niño interno,
que contigo corre, canta y cuenta cuentos;
que sin causa ríe y llora de alegría,
porque descubre la vida en cada sueño.

Déjame, ¿sí?
pero, eso sí, sin falta, déjame
estar a tu lado cada noche y cada día,
en todas las aventuras que tu pecho anida;
compartir contigo tu pena y alegría,
que allí donde vas, la vida es realmente vida.

1 ya dijeron que pensaban. ¿Y tu?:

esas son palabras de un corazon que esta muy enamorado, que afortunada es la dueña de tanto amor!!!

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